Una entrerriana, la primera mujer en nadar en las aguas heladas del Bósforo
Química y deportista de la ciudad de Crespo, Entre Ríos, Mariana Godoy Goette, es nadadora de aguas heladas y se convirtió en ser la primera mujer en unir dos continentes a través de las aguas heladas del Bósforo. De visita en Estambul, Mariana vio la oportunidad de sumergirse en el mar -que en esta época del año registra unos 8 o 9 grados- y unió a nado Europa y Asia. Lo hizo sin traje de neopren y con esta hazaña logró una meta más en su carrera deportiva.
“Estaba visitando a mi familia y cuando vi el Bósforo que divide los dos continentes, quise cumplir un sueño que anhelaba hace muchos años” dice Mariana a Y de repente la noche y comenta que tras esa idea, contactó a otros nadadores de aguas gélidas. “Encontré mucha amabilidad y mucho entusiasmo del grupo de nadadores que no suelen hacer esta experiencia, sino solo tirarse y nadar en las aguas heladas por un tiempo. Inmediatamente decidieron acompañar la travesía, algunos con aletas para ayudarse a nadar, otros con traje de neopreno, pero todos con gran entusiasmo porque son pocas las mujeres que practican deportes en Turquía y no había hasta el momento ninguna mujer que hubiera nadado en el Bósforo helado”, comenta Mariana que ya ha nadado en la Bahía de San Francisco hacia la isla de Alcatráz, en el Campeonato Mundial de Aguas Heladas, en la bahía de Tallinn, capital de Estonia, donde la temperatura del agua llegó a 0,6°C, entre otras experiencias extremas de nado.
Nacida en Crespo, Entre Ríos, Mariana es emprendedora, Ingeniera Química, con un Máster en Administración de Empresas y un Post Grado en Energías Renovables, y desde la época de la universidad en la UN del Litoral, comenzó a practicar varias disciplinas, natación, ciclismo, running, gimnasio, como forma de manejar el estrés. Así llegó a cumplir ahora este sueño en Estambul, donde las complejidades son las corrientes marinas, desde el mar Negro hasta el mar de Mármara y viceversa, más la afluencia de dos ríos con fuertes ingresos de masas de agua que afectan la circulación, así como el gran tráfico marítimo de la zona.
“Fue genial la calidez que encontré en personas que ni siquiera me conocían, amables, con ganas de hacer y felices con el propósito de ayudar a aquella Argentina que apareció de repente ahí e insistía e insistía en que quería hacer realidad un sueño y en que era capaz de lograrlo”, señaló Mariana, algo que replicó en sus redes sociales.

Impresionante la nota! Un verdadero orgullo argentino. Historias que inspiran y resaltan el talento, la perseverancia y la fortaleza física, mental y espiritual de una atleta que ha alcanzado logros extraordinarios!!